viernes, 28 de septiembre de 2007

Consejos para hacer un bló (*)

Circula por la red esta especie de meme y he sido invitado por el Sr. Bugman a hacer mi propuesta al respecto. Se trata de escribir tres consejos para quienes tengan la intención de meterse en esto de los blós (*).


He querido entender que sería una muestra de pedantería por mi parte entrar en la estilística del bló (*), ya que llevo en esto bastante poco tiempo y algunos de los resultados que el visitante puede ver en este barco son fruto de improvisaciones y casualidades. Por otra parte, siguiendo un poco hacia atrás la cadena, he podido comprobar que el estilo ha sido ya tratado por varios participantes sin duda más cualificados que yo. Así pues, me voy a centrar en la forma de escribir, en la corrección del texto y aún así, tal vez no quede demasiado acertado. No sé. Pero bueno, que el Sr. Bugman haya pensado en mi, es algo que mi vanidad no puede pasar por alto, de modo que allá voy.

Primer consejo. No atente contra el idioma. Mire, a todos nos gusta que nuestros lectores nos consideren gente erudita, con solvencia en el manejo del lenguaje, pero rebuscar las palabras con que se pretende expresar una idea es entrar en un terreno incierto. Es mucho más eficaz y tal vez menos vergonzoso, expresarse con palabras llanas, de uso común, que meter la pata por irse a los Cerros de Úbeda. Imaginemos que vamos a contar que el otro día nos forzaron el coche y nos robaron. Si usted pone: “Ahí estaba un servidor de Dios y de ustedes, contemplando extáticamente a mi entrañable móvil con motor de combustión interna alternativa y encendido por compresión, brutalmente desgarrado, profanado, violado, ultrajado … “ peca usted de barroco. Puede que en un contexto puntual venga a cuento, pero si no, cansa. Peor es, desde luego, si usted pone: “Y yo me pensé: tuvistes mucha ignominiosa fortuna de haber encontradote con lo que unos desalmados carentes de alma le habían acaecido a tu vehículo propulsor”. Aquí peca usted de terrorista. Lo puede resolver con un simple y elegante: “se me cayó el alma a los pies al ver mi coche forzado”. Oiga, y tan bien que le queda.

Segundo consejo. Ojo a la ortografía. Vamos a ver, esto es un medio en el que se escribe a golpe de tecla, a veces bastante deprisa y el gazapo existe. Se puede usted olvidar de poner alguna tilde, comerse alguna hache, la B y la V están una al lado de la otra en el teclado, etc. Eso se puede admitir y excusar como error puntual, pero si usted no pone ni una mayúscula, hace malabarismos con la LL y la Y, con B y la V, con la G y la J, no pone ni un acento y confunde ahí, con hay y con ¡ay! todo ello en un párrafo de cuatro líneas ... pues mire usted, espere a que la tecnología avance y los blós (*) sean hablados. Mientras tanto, le dejo un enlace.

Tercer consejo. No convierta su artículo en una máquina del tiempo. Me explico. Si usted empieza a escribir utilizando el presente, quédese ahí a no ser que cite usted algo del pasado o ilustre usted una situación determinada. Fíjese: “Acababa de salir de mi casa, cuando a la vuelta de la esquina, vería a una señora que se cayó y yo le digo : señora ¿se ha hecho usted daño? Hará el favor intentar levantarse. Vea la cantidad de idas y vueltas en el tiempo que ha dado su episodio con la señora.

En fin, confirmará el lector que me he centrado sobre todo en la forma de escribir y es que coincido con el Sr. Bugman en que un bló se hace para ser leído y por lo tanto, ha de estar bien “escribido”.

Ahora, le paso el testigo a tres compañer@s, para que, si gustan, hagan lo propio: Patri, TheJab y Monika.

Vean los tres consejos del Sr. Bugman.

(*) Me he empeñado en una cruzada: hispanizar la palabra blog. En los Sin-Logismos de Bugman, algún comentarista sugirió bló (con tilde y todo) y me gustó. El que quiera que se apunte, no hay que pagar derechos.

Con Dios.

lunes, 24 de septiembre de 2007

Resultados de la encuesta nº 2

Bien, cerrada ya la encuesta de la frase: "¡Qué bien te veo! ... etc., etc." Doy paso a los resultados.

Es verdad en un 77 % de los casos (14 votos)

Es mentira en un 11 % de los casos (2 votos)

Y no la utiliza el 11 % de la población (2 votos)

El análisis en este caso es muy claro, entre siete y ocho de cada diez personas que le digan esto, se lo estarán diciendo de verdad. Que sean siete o sean ocho, dependerá del tipo de amigos o enemigos que usted tenga.

Por el momento, voy a dejar la encuesta dormir un tiempo, hasta que se me ocurra otra frase para sondear.


Con Dios.

jueves, 20 de septiembre de 2007

Flipada nº 9 (otoñal)

Ya estamos casi en otoño y el martes pasado saqué el barco del varadero de Nunca Jamás y puse proa a la rutina a ver qué tal. El resultado fue de lo más satisfactorio. Las playas estaban libres de "turistas a la plancha", la brisa marina no traía olor a cosmético-detergentes sino a agua con un nivel de contaminación todavía no letal, la circulación vial se situaba en un límite de caos casi soportable y los politicastros ya se habían puesto a bajar de un burro en todos los medios de comunicación habidos y por haber.

Observé en mi primera travesía post-estival algunos barcos corsarios medio hundidos con nombres tan pintorescos como State Street, Barclays o Northern Rock, pero no les hice mucho caso, porque prácticamente no quedaba nada de sus tesoros. En un principio me alarmé un poco ante tanto hundimiento, pero el Sr. Solbes, encargado de la “solvencia” patria (qué cosas ¿eh?) dijo por la TV que no habría ninguna situación parecida por estas aguas. Oído el mensaje, dejé a un lado ese conato de alarma, para dar paso a un franco estado de preocupación. Ya veremos …

Había un hálito de tristeza mezclado con desesperación entre la población nativa española por los efectos de dos mareas rojas. La tristeza venía por haber cosechado SOLO PLATA (¿?) con una de ellas y la desesperación porque en la otra, los únicos que cosechan plata son los que forman parte de la marea. En fin, estos españoles siempre igual.

En lo personal, este mes tomé posesión del barco que me ha estado permitiendo ganarme el sustento en los últimos años. A ello me dio derecho el aprobado en unos exámenes que hice al principio del verano.

En otro orden de cosas y cual si de una banda de encapuchados con boina se tratase, Peter Pan y un servidor rompieron la tregua y como lo pille se va enterar. Le envié un SMS diciendo: “Llega el otoño. Apréstate a la defensa, porque voy a por ti”. Pan me contestó con otro: “Tu i qntos ms glpllas?” que traducido viene a significar: “¿No necesitará usted refuerzos estimado capitán?”

También observará el lector que ya ha vuelto a cambiar la calidad tipográfica de mis entradas, debido a la mejor señal ADSL que recibo en mi nave gracias a haber aceptado una oferta telefónica que me han hecho en la que, si contrataba una línea con conexión inalámbrica a la cisterna de los aseos y a la vitro-cerámica, me daban gratis las señales luminosas a barcos nacionales y un equipo completo para hacer señales de humo. Vamos, un chollo.

En fin, solo falta que el calor que todavía azota estos mares cese un poco en su intensidad y la estación otoñal se haga patente. Ya les iré contando.

Con Dios.

domingo, 16 de septiembre de 2007

Resultados de la encuesta nº 1

Bueno, tras la demostración formulada de que la Madre Naturaleza está equivocada, tan bien recibida por algun@s lector@s y que prometo no volver a repetir, paso a los resultados de la frase a encuesta.

Como recordarán los lectores, la frase era
"Ahora mismo iba a llamarte ..." y se trataba de saber estadísticamente si al oirla debíamos confiar en nuestro interlocutor o no. Pues bien, la encuesta arroja los siguientes resultados.

Es verdad: un 40 % con 8 votos.
Es mentira: un 35 % con 7 votos.
Nunca digo eso: un 25 % con 5 votos.

Como verá el lector, hay mucha dispersión en los resultados, aunque haciendo una lectura positiva cabe pensar que o la frase no se dice o cuando se emplea es verdad. Sólo un 35 % de los que la emplean (¡Ejem! ¡Cof! Cof!) suelen emplearla para salir del paso. Lo que sí parece ser un sentimiento mayoritario, es que si hay dineros de por medio, ni estadísticas, ni gaitas.

En fin, dados los resultados, el propio lector sabrá qué hacer.

Ahora vamos con la siguiente frase a encuesta.

Usted se encuentra con un@ amig@ de toda la vida a quien no veía desde hace tiempo y le dice: "¡Qué bien te veo! ¡Estás como siempre! ¡Por ti no pasa el tiempo!" (valórese la frase entera o alguna/s de sus partes). Vamos a ver qué grado de credibilidad tiene la expresión.

Con Dios.

P.D.: Recuerdo a los lectores que pueden aportar frases dudosas para someterlas a encuesta.

jueves, 13 de septiembre de 2007

Naturaleza Viva (Episodio 3)

Voy a analizar una serie de leyes físicas y el lector tendrá la oportunidad de valorar qué “caprichitos” tiene la Madre Naturaleza. Hasta ahora, he excusado como errores de la Naturaleza determinados aspectos de la vida animal ilustrados en los episodios 1 y 2 de esta serie. Tal vez no fueron errores, sino que “Mamá N.” lo hizo a propósito, con toda la mala leche (con perdón) del mundo. Digo esto, porque en lo que viene a continuación, no hay atenuantes, esto lo ha hecho a conciencia.


1º.- Ley de la Gravitación Universal. También conocida como “Ley de la Gravedad. Ya saben, Newton echándose una siestecita bajo un manzano y el árbol que le manda un recadito y le acierta en plena azotea. Al bueno de Isaac, la conmoción cerebral consecuente al manzanazo le lleva por un lado a dar gracias a Dios de no haber echado la siesta bajo un cocotero y por otro, a formular lo siguiente:



Enunciado, quedaría como que “la fuerza con que se atraen dos cuerpos es directamente proporcional al producto de sus masas e inversamente proporcional al cuadrado de la distancia que los separa”. ¡No me dirá el lector que no hay ganas de … en la formulita! A ver, ya que tenían que intervenir las dos masas ¿por qué no las pone sumándose en lugar de multiplicarse? ¿Y por qué no puso la distancia al cubo? La humanidad lleva milenios dándose mamporros contra el suelo y no sabe por qué. Pues porque la Madre Naturaleza le dio a la tecla "x" en lugar de a la "+".

2º.- Einstein, un sabio alemán que no tenía cara de sabio, formuló la siguiente ecuación:



Dicho en cristiano: si falta masa, sobra energía. La idea es que cuando se rompe un átomo grandote (dentro de lo grandote que pueda ser un átomo) en dos más pequeñitos, resulta que éstos pesan menos que el gordo antes de romperse, de modo que falta masa y sobra energía. Pero ¿hacía falta multiplicar por la “velocidad de la luz al cuadrado”? (*) Eso no podía llevar a nada bueno. La Naturaleza podría haber puesto la velocidad del sonido y sin elevarla al cuadrado, de esta manera las bombas atómicas serían poco más que petardos. Imagínese el lector poder tirar varias bombas atómicas para celebrar las fiestas del pueblo y todos tan contentos, felices y borrachos. ¡Pues no!

3º.- Si el lector se hace la siguiente pregunta ¿de qué diámetro tengo que cortar una madera para fabricarme una rueda de un metro de circunferencia? Pues ni el mejor de los científicos le va a dar un número exacto. Vea la siguiente fórmula



Divide usted la longitud de la circunferencia entre su diámetro y le da … PI. Un número que no se acaba nunca, aquí dejo al lector con los cien primeros decimales del numerito.

Π ≈ 3,141 592 653 589 793 238 462 643 383 279 502 884 197 169 399 375 105 820 974 944 592 307 816 406 286 208 998 628 034 825 342 117 067 9 (**)

En 2004, se habían computado 1.351.100.000.000 decimales del numerito caprichoso.(**)

PI … ¡si es que hasta el nombre! …

(*) El valor de la velocidad de la luz al cuadrado es 90.000.000.000.000.000 (noventa mil billones vamos, una animalada).

(**) Fuente Wikipedia

Con Dios.

sábado, 8 de septiembre de 2007

Encuesta

Desde que descubrí que Blogger tiene una herramienta para hacer una encuesta, he querido hacer una. Pero no sabía qué preguntar. Todo me parecía ya muy visto y sin demasiado interés.

Después de mucho pensar y pensar y dequepensar, se me ha ocurrido, no una encuesta, varias encuestas y, además con un fin de utilidad pública. Les explico.

Cotidianamente se intercambian frases en conversaciones, aseverando o negando cosas y en muchas ocasiones uno no sabe qué pensar. Ejemplo: usted se encuentra con un “amigo” que le debe dinero desde hace un mes y ni siquiera le ha llamado y eso que prometió devolvérselo en “unos días”. El “amigo” a quien el encuentro ha pillado por sorpresa y no ha podido esquivarle le dice “Hombre Pepe, ahora mismo iba a llamarte”. Usted tiende a no creerse la frase, pero duda ¿Me estará tomado el pelo (otra vez)? ¿Será verdad que iba a llamarme? ¿Con qué criterio objetivo sale usted de la duda?

Hay más ejemplos, que espero que se vayan tratando con el tiempo, pero la idea es: sometamos a encuesta la fiabilidad de algunas frases. Usted tendrá al menos esta estadística para ver si le agarra de las solapas o no. De todas formas si tras la frase le pide más dinero, desconfíe, con estadística o sin ella.

La encuesta será semanal y los resultados publicados una vez cerrada. Puede dejar en cualquier comentario del blog las sugerencias que desee para someter a encuesta frases que le ofrezcan alguna duda. La encuesta figura en la columna de su derecha, justo debajo de mi foto con la espada.

Con Dios

Radio La Ortiga